El problema con la mayoría de los validadores es que simplemente no son capaces de cubrir toda la gama de todas las aplicaciones. Esto puede causar problemas en muchas formas diferentes, como todo el propósito de un validador es proporcionar información sobre el tipo de aplicación que haya elegido. Por ejemplo, si se descarga una aplicación de Windows desde un sitio web, los datos asociados con esa aplicación estarán contenidos dentro del propio formulario. El problema aquí es que la aplicación basada en web podría confundirse y se muestran de manera diferente en la página de la que en realidad está descargando.
La mayoría de las aplicaciones incluirán un número de entradas de registro que hacen que sea muy difícil para un validador para determinar lo que realmente se está descargando. Hay una gran cantidad de otros problemas que pueden causar problemas para un validador y es por eso que hay validadores que se pueden utilizar en el Internet de forma gratuita. Las versiones libres de estos tipos de validadores le proporcionará información detallada acerca de todas las aplicaciones disponibles y le dirá exactamente lo que está pasando cuando el proceso pasa a través.
El único inconveniente con las versiones libres de estos programas es que no van a tener la capacidad de capturar todos los datos que se utilizan durante el proceso de descarga. Lo mismo puede decirse de una aplicación de pago, porque la mayoría de los programas que se están utilizando en el Internet son programas pagados. Los programas que están disponibles para su descarga son capaces de ofrecerle mucho más que este aspecto del proceso de descarga. La única limitación real de este tipo de aplicaciones es que no son capaces de cubrir toda la gama de todas las aplicaciones que están disponibles en Internet. Sin embargo, si es necesario descargar una aplicación que no está cubierta por un validador, entonces usted será capaz de encontrar uno gratis.